Ven
- Elena Botana
- 23 sept 2016
- 1 Min. de lectura
Ven.
Tú sólo ven.
No sé a dónde,
pero ven conmigo.
Quiero que vengas
porque desde el principio supe que podía contar contigo.
No hasta dos, no hasta diez,
sino que podía contar contigo.
Quiero que vengas porque ocupas mucho,
demasiado espacio, para ser una sola persona.
Porque yo soy mía, enteramente mía,
y lo sabes, siempre lo has sabido,
y aún así no sé como, ahora hay un trozo de mi,
que ya es tuyo.
Y el vacío que dejas cuando te marchas indica todo el lugar que llegas a ocupar.
Y dios,
si es vacío, ¿por qué pesa tanto?
Quiero que vengas porque siempre he sido buena entendedora,
y aún así
no me basta con pocas palabras si eres tú quien habla.
Y qué bien suena mi nombre,
qué bien suena cada vocal y cada consonante que lo componen,
cuando eres tú quien lo pronuncia.
Quiero que vengas.
Y aunque no sea para quedarte, o para seguirme,
al menos que sea para devolverme la luz
que tenían tus ojos cuando me miraban.
Quiero que vengas. Y ya está.
Así que
ver si con un poco de suerte,
al viernes se le cae la “r".
Comments